cortes de carne de cerdo

La carne de cerdo es el elemento principal de numerosas recetas culinarias, sobre todo, en hostelería. Por eso, en Gran Campo tenemos una amplia variedad de despieces y cortes de carne para restaurantes: carne de calidad y con todas las garantías, perfecta para añadir a tu carta.

Despiece de cerdo blanco

El cerdo blanco es una de las variedades que más se utilizan en cocina.

Categorías del cerdo blanco:

  • Categoría extra:

    Elige estas piezas para realizar a la plancha, filetear, a la parrilla o rellenar. 
    – Solomillo: pieza de carne tierna, jugosa y limpia de grasa. Perfecta para asar, para elaborar brochetas o fondues, marinados o cocciones al vacío.
    – Cinta de lomo: es una de las partes más apreciadas del cerdo. En Makro disponemos de piezas de 3 y 4 kg envasadas al vacío tanto congeladas como frescas. También las puedes encontrar fileteadas. Perfecta para asados y rellenos, en filetes para freír, hacer a la plancha, empanar o brasear.
  • Carne de primera categoría:

    Ideal para freír o elaborar a la brasa. Se compone de:
    – Chuletas de riñonada: carne y hueso de la parte trasera del lomo con costillas y columna. A la plancha o a la brasa resultan suculentas. 
    – Chuletas de lomo: son más sabrosas y tiernas. 
    – Jamón: sin curar y sin hueso, estilo york. Perfecto para entremeses o platos de picoteo.
carne tabla
  • Carne de segunda categoría:

    Para asar y cocinar a la plancha y para elaborar picar para albóndigas o hamburguesas. 
    – Aguja: resulta muy tierna y jugosa debido a su grasa infiltrada. Entera es perfecta para asados y cortada en chuletas para freír o cocinar a la plancha.
    – Paletilla: Es una carne limpia y jugosa. Entera es ideal para hacer lacón y asar y en trozos para elaborar ragúes o pinchos morunos. 
  • Carne de tercera categoría:

    Tiene múltiples usos culinarios. Se compone de:
    – Codillo: es la parte inferior de las patas traseras y delanteras del animal. Se utiliza para cocer o para asar. Requiere bastante tiempo para su elaboración pero el resultado es exquisito. 
    – Panceta: perfecta para asar, freír, para cocidos o torreznos. También se presenta ahumada, lo que conocemos como bacon.
    – Costillar: se presenta adobado o fresco. Ideal para asados o barbacoas.
    – Tira de costillas: Tiene bastante carne y mucha infiltración de grasa. Se puede asar o guisar para dar sabor a pastas y arroces.
    – Carrilleras: cocidas se convierten en un plato muy consumido en restaurantes. Requiere un tiempo prolongado de cocción. Tocino blanco: es la parte que recubre al lomo y se consume fresco o salado. Se utiliza principalmente para dar sabor o para elaborar foie gras. 
  • Casquería:

    Con la que elaborar guisos o platos tradicionales como el cocido gallego. Se compone de papada, patas, manos, morro, orejas y rabo.  

Despiece de cerdo ibérico

Incluir carne de cerdo ibérico en tu menú es sinónimo de éxito. Su fama de bocado exquisito se traduce en suculentos platos que animarán a tus clientes a repetir visita a tu establecimiento. Puedes encontrarla en nuestras tiendas Gran Campo despiezado.

Tipos:

  • Carrillera ibérica: se pueden elaborar guisos y estofados con un sabor intenso y una textura agradable al paladar.
  • Presa ibérica: es la cara interna de la paleta. De coloración intensa, es una carne jugosa y con sabor. Se puede elaborar a la plancha o a la parrilla como principales opciones.
  • Pluma ibérica: resulta muy tierna al paladar y se utiliza en guisos y estofados por su textura y también se puede asar.
  • Secreto ibérico: a la plancha, a la brasa o en salsa, es uno de los platos que más éxito tienen en una carta de producto.
  • Cinta de lomo ibérico: muy versátil a la hora de cocinar, es idónea para elaborar guisos, estofados y todo tipo de asados.
  • Lagarto ibérico: pieza que se prepara casi siempre a la plancha o a la brasa y que resulta un bocado exquisito para los comensales.
  • Aguja ibérica: tiene bastante infiltración de grasa por lo que es una pieza muy suculenta ideal para elaborar carpaccios entre otras muchas recetas.
  • Chuletero ibérico: lo conforma la cinta de lomo, el hueso del espinazo y el arco de la costilla. En asados resulta suculento y es una pieza que los comensales demandan cada vez más en las cartas de producto.
  • Costillas ibéricas: debido a que los cerdos ibéricos son criados en libertad el movimiento que realizan le otorgan un sabor a las costillas muy superior a otros cortes de ibérico, por lo que es una pieza muy apreciada en cocina. Rebozadas, adobadas, en cocidos serranos, o para asados y barbacoas resultan exquisitas.
  • Tira de costilla ibérica: es una parte muy sabrosa, sobre todo a la parrilla o asada.
  • Solomillo ibérico: otro de los productos estrella del ibérico. Abierto en libro, en medallones, asado o a la plancha, es un plato que triunfará en cualquier restaurante.
  • Lágrima ibérica: procede de la parte intercostal del animal y es ideal para elaborar a la parrilla acompañado de ensalada o patatas.
  • Abanico ibérico: es la carne que envuelve a las costillas, con bastante grasa infiltrada. Resulta muy jugosa a la plancha.